En el puesto de mando, Don Felipe recibió una exposición del informe de las consecuencias de los incendios y la explicación de los trabajos realizados a cargo de los responsables de los distintos servicios y unidades de Emergencias.

Destaca la dificil tarea que están llevando a cabo los distintos servicios y unidades de Emergencias debido a la inclemencias meteorológicas con temperaturas que alcanzan los 40 grados y rachas de viento que superan los 70km/h. A pesar de esta situación, los responsables de los distintos servicios y unidades de Emergencias han conseguido estabilizar la zona, aunque se mantienen algunos focos de evolucion incierta. Se han calcinado entre 2.000 y 3.000 hectáreas y se han evacuado de manera preventiva hasta diez núcleos de población de la comarca, cerca de 600 personas.

Su Majestad el Rey tras su visita al puesto de mando se dirigió a Azabal (Cáceres) para mantener un encuentro de las personas desalojadas y afectadas en sus viviendas y negocios por los efectos del incendio.

Las personas afectadas pudieron transmitir a Don Felipe sus preocupaciones por la situación vivida y sobre el futuro que le espera a su comarca. Está previsto que, a lo largo de la tarde, los afectados puedan regresar a sus hogares.